Antes de llegar a Cabo Polonio, viniendo desde La Pedrera, se extiende un verdadero paraíso oceánico casi desconocido: Oceanía del Polonio. Esta joya de la costa rochense se encuentra en el kilómetro 254 de la ruta 10, y se accede por un angosto camino de tierra rodeado de verde.
La playa, blanca y extensa, parece intacta. El paisaje solitario invita a disfrutar del verano en total libertad: bañarse sin ropa entre las olas verdes, andar a caballo a orillas del mar, pescar en soledad, aventurarse en un vuelo de ala delta.
Por supuesto, cuando se descubre un tesoro, no permanece oculto mucho tiempo. En la temporada alta –enero y febrero- llegan varios veraneantes atraídos por la naturaleza virgen del lugar, aprovechando las atractivas opciones de hospedaje.
Además de cabañas y ranchitos sencillos para alquilar, está la Posada del Buscavidas (teléfono +598 4470 5207), con diez habitaciones cómodas y un excelente restaurante. La posada tiene un bar de playa abierto día y noche con música, picadas de mariscos y tragos. Todas las construcciones comparten el estilo rústico y chic que da carácter al balneario.
Para disfrutar de la quietud absoluta, debes viajar entre noviembre y diciembre, o a fines de marzo. Escenario de campos y reservas naturales, Oceanía del Polonio es un lugar perfecto para el turismo rural y el ecoturismo. Su área ya está loteada, con terrenos y fincas a la venta bien cerca del mar.
Oceanía del Polonio está a solo 9 kilómetros de Cabo Polonio y a 24 kilómetros de La Pedrera, complementándose con los servicios de ambos y con sus opciones de ocio.
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