Durante el lunes de carnaval (generalmente la segunda semana de febrero), el clima pacífico de La Pedrera se transforma por completo dando paso a una de las mayores fiestas populares del país. Y es que el Carnaval de La Pedrera, salvo en magnitud, no tiene nada que envidiar a los festejos tan citados como los de Salvador, Recife o Gualeguaychú. Los que aman las maratones de fiesta, baile y alegría no pueden perderse este carnaval que ya es toda una tradición en el balneario y que hoy convoca más de 15 mil personas en la calle principal.
El Carnaval de La Pedrera empezó siendo una fiesta vecinal, entre familias y amigos de la localidad. Aunque algunos pobladores y veraneantes de siempre no están contentos con la masificación del festejo, muchos disfrutan de la popularidad que ha alcanzado, atrayendo a uruguayos de todas partes y a muchos extranjeros que no pueden creer cómo en un balneario tan pequeño pueda vivirse una fiesta tan grande. En su mayoría, son jóvenes los que pueblan el centro de La Pedrera con espumas, bebidas y disfraces, aunque también se ven niños y adultos (sobre todo en las horas diurnas) participando del encuentro.
El Carnaval de La Pedrera, fiesta ecléctica
Ya desde las primeras horas del día se empieza a sentir la atmósfera carnavalera. Hay que ir dispuesto a mojarse: son incesantes las guerrillas de agua en las calles (sobre todo desde las casas que dan a la principal) e incluso en la playa. Pistolas de agua, baldes, botellas, tuppers, todo sirve para mojar al paseante desprevenido. De noche, el agua deja lugar a la espuma: se venden pomos a 100 pesos en todas las esquinas. Se recomienda ir de championes (puede haber vidrios en el suelo) y con ropa que no importe embarrar.
La espontaneidad y el color definen este carnaval donde lo ecléctico prevalece sobre cualquier categorización. Al caer la tarde, empieza el corso con agrupaciones temáticas, aunque no hay un desfile organizado como el de las Llamadas u otros carnavales uruguayos. La gente toda protagoniza la fiesta, donde no vale no ir disfrazado. Se ven grupos de amigos con el mismo atuendo, muchos ofreciendo una performance completa (bomberos con pomos como extintores, enfermeros con bebidas espirituosas en el circuito del suero, periodistas deportivos haciendo notas). Otros improvisan su vestimenta carnavalera con un antifaz, una careta o una peluca, que incluso pueden comprarse en el propio balneario.
Ya caída la noche, la fiesta avanza con música ininterrumpida a lo largo de las cinco cuadras de la calle principal. Diferentes bares y restaurantes ponen sus barras con bebidas, comidas y DJ’s. Algunos entran a bailar en los boliches, otros prefieren quedarse en alguna de estas pistas callejeras y muchos otros van circulando de una pista a otra compartiendo un poco de cada música. Alguna cuerda de tambores y escuela de samba da la sonoridad típica al Carnaval de La Pedrera, pero lo cierto es que a lo largo de la noche es posible haber bailado todos los ritmos, desde funk y hip hop hasta plenas uruguayas, clásicos de la cumbia argentina, reggaetón y salsa. El baile sigue hasta bien pasado el amanecer.
Algunos consejos para disfrutar el Carnaval de La Pedrera
Si bien es cierto que los espíritus mansos no estarán a gusto entre la multitud, el Carnaval dista de ser la fiesta descontrolada y peligrosa que muchos medios difunden. Es un entorno de alegría donde los desconocidos se abrazan, los grupos de amigos se ensanchan y las canciones y bebidas se comparten sin prejuicios (eso sí, un consejo: no separarse del grupo si no tienen cómo comunicarse; es fácil perderse entre la gente). En los últimos años han aumentado mucho las medidas de seguridad e higiene que todos disfruten la fiesta en mejores condiciones. Son estrictos los controles de espirometría en la ruta, así que quienes planean ir en auto, no deben olvidar designar conductor.
Para disfrutar a pleno el carnaval, se recomienda buscar un alojamiento cercano con mucha anticipación. En La Pedrera los precios suben ese fin de semana, pero Arachania y La Paloma son buenas opciones. Quienes se alojan en otras playas de Rocha o van y vienen desde Montevideo deben comprar pasaje con anticipación, ya que al final del Carnaval se acumula bastante gente esperando ómnibus en la entrada de La Pedrera.