Negocios inmobiliarios

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La región latinoamericana se ha visto favorecida frente a otras regiones económicas debido a la crisis que afecta a los mercados internacionales. Dentro de la región se destaca Uruguay como uno de los destinos alternativos para los inversores inmobiliarios que buscan las buenas rentabilidades y seguridad jurídica.

Ventajas de la inversión inmobiliaria en Uruguay

Uruguay es un país muy competitivo que se encuentra en pleno desarrollo. Ofrece grandes oportunidades de inversión en sectores como la tecnología informática (creación de software), el agropecuario, el forestal, el inmobiliario y el de la construcción. En tiempos en que la crisis mundial afecta en mayor o menor medida a los países industrializados, Uruguay puede captar inversores que busquen estabilidad económica, política y jurídica.

El sector inmobiliario atrae los capitales que procuran invertir en sitios seguros y rentables. Punta del Este es uno de los sitios de mayor atractivo por ser un destino turístico reconocido mundialmente, pero también hay otras zonas uruguayas que se encuentran en expansión como Montevideo, Colonia y Rocha. El mercado uruguayo presenta una alternativa segura de turismo residencial de segunda vivienda, que resulta accesible para Europa.

Una de las grandes ventajas está en las políticas de inversión, donde los inversores extranjeros son tratados en plano de igualdad con los inversores nacionales y pueden adquirir libremente propiedades sin pagar impuestos extra. Las compras de inmuebles están reguladas por el Banco Central del Uruguay, que asegura la transparencia de las transacciones y verifica la legalidad de los fondos que se empleen en ellas.

Otra ventaja está en la no obligatoriedad de residencia en el país. Los extranjeros que adquieran propiedades no necesitan vivir en el país, sólo necesitan su pasaporte. También pueden retirar el dinero del país libremente. Para quienes deseen residir en Uruguay, la renovación de la visa es automática y la obtención del permiso de residencia no presenta inconvenientes. A todas estas ventajas se suma el costo de vida inferior al de los países europeos.