Uruguay cuenta con numerosos arroyos de agua clara y ríos caudalosos, donde la pesca de agua dulce se da muy bien. Para quienes desean combinar el descanso, la vida al aire libre y los deportes, la pesca en Uruguay es una experiencia excepcional debido al clima agradable y la abundancia de fauna.
Las especies preferidas para la pesca en agua dulce
Las especies de agua dulce que más se buscan en la pesca son la tararira tornasol, el pejerrey, el dorado y el surubí.
Tararira tornasol: Se desarrolla en hábitats cerrados y no navegables, por lo que tiene una permanencia asegurada. Es la especie más sedentaria y debe devolverse para no alterar su entorno. Una tararira adulta puede soportar más de 20 minutos fuera del agua y sobrevivir si se la retorna, siempre que no tenga heridas en puntos vitales.
Temporada: La temporada comienza a fines de agosto y se extiende hasta marzo o abril, de acuerdo a los períodos de lluvia. Se las captura en cauces menores con poca profundidad. Esta especie sale del letargo invernal a partir de los 18ºC. Son zonas de captura el arroyo Salsipuedes Chico, el Tres Árboles y otros de los que desembocan en el Río Negro.
Equipo: Para la pesca de esta especie es necesario tener el permiso de los dueños de los campos, además de contar con guías especializados. La modalidad de pesca es el spinning y en los meses de calor también el trolling. Se utilizan señuelos de cuerpo o cucharas giratorias. Se emplean líneas de nylon para 20 libras. Es necesario portar pinzas, una curvada y otra de puntas redondas, para poder extraer el anzuelo de la boca del pez.
Pejerrey: Es el de mayor distribución y tiene la mayor temporada de captura.
Temporada: Comienza en febrero y termina en septiembre cuando comienza la temporada de desove. Se lo puede capturar en el Río Negro y la Laguna Merín. Sobre el Río Negro hay sitios pesqueros como San Gregorio de Polanco, Baygorria, Rincón del Bonete o Palmar, abiertos para todo público, con servicios de hotelería y posadas. En las cuencas de los ríos Olimar y Cebollatí, está el pejerrey mirimensis, más robusto. Estas zonas están bordeadas por monte cerrado, por lo que la pesca debe realizarse desde los bancos de arena, a los cuales se accede mediante embarcaciones. En la costa del departamento de Colonia podemos encontrar una tercera especie de pejerrey que alcanza mayor porte y que también debe pescarse desde los bancos de arena.
Equipo: En la Represa de Baygorria, la pesca se hace con equipos de flote, con boyas de madera de balsa y con cañas con reels frontales. En los embalses se utilizan únicamente aparejos de fondo, debido a la escasa profundidad. Estos pejerreyes se pescan sólo desde la costa, haciendo innecesarias las embarcaciones.
Dorado: Es una especie combativa, lo cual atrae a pescadores de todo el mundo. Se lo encuentra en el Río de la Plata y en el alto río Uruguay, principalmente frente a las costas de Salto, donde los ejemplares son mayores y más abundantes. Pueden alcanzar los 20 kilos. Estos peces tienen preferencia por el lecho de piedras y las correderas de Salto Chico. El lecho de piedra del río Uruguay delimitado por la Represa de Salto Grande es la mejor zona para la captura de esta especie.
Equipo: Las aguas a esta altura son muy claras debido al lecho rocoso, lo que facilita la pesca con cebos artificiales, en modalidad trolling. Es aconsejable utilizar los servicios de guías especializados para la captura de estos enérgicos peces.
Surubí: Se da en la zona del alto Río Uruguay. Los ejemplares rondan los 15 kilos, pero no es extraño encontrar ejemplares de 30, 40 y hasta 50 kilos. La zona principal está sobre el río Uruguay, en lo que se conoce como Los Corrales. Está a 10 kilómetros de las termas de Daymán, por lo que la infraestructura hotelera de la región es muy adecuada. Siempre debe respetarse la reglamentación que permite la captura de una sola pieza diaria en cada embarcación.
Temporada: Comienza a fines de mayo y va hasta mediados de agosto.
Equipo: En su lucha por liberarse del anzuelo, este pez busca las profundidades y puede llegar a arrastrar la embarcación. Su comportamiento es estático, lo que facilita su captura cuando se encuentra en cardúmenes. A partir del año 2006 se legisló sobre la captura de estos peces para evitar su depredación. De allí que se permita únicamente capturar un ejemplar por día y por embarcación. Sin embargo, los buenos deportistas suelen devolver estos grandes ejemplares al agua. Se emplea trolling en dirección de la corriente.
