La gran variedad de atractivos de Piriápolis (playas, cerros, historia, parques) lo convierte en un destino apasionante en cualquier época del año. Con temperaturas promedio de 28ºC, el verano es la temporada alta en Piriápolis, cuando llega la mayor cantidad de turistas y las playas se ven repletas.
El invierno es muy frío, con promedios entre 7 y 15ºC. La rambla puede ser ventosa pero hay varios paseos culturales que se pueden hacer en esta época, cuando Piriápolis luce más tranquila. En primavera y otoño hay temperaturas medias, perfectas para paseos ecológicos. Fuera del verano, la Semana de Turismo es una de las más concurridas de Piriápolis, ya que se pueden combinar a la perfección el mar, los city tours y el ecoturismo.
Las lluvias se distribuyen de forma pareja a lo largo del calendario. Llueve aproximadamente seis días por mes, generalmente con vientos fuertes. Si llueve durante tu estadía en Piriápolis, puedes aprovechar para los paseos bajo techo: museos, restaurantes, boutiques o casino.